¿Qué es un EPI?

Un EPI es un equipo de protección personal que se usa para prevenir lesiones en el trabajo. Los EPIs pueden incluir cosas como guantes, gafas, tapones para los oídos, ropa de protección y respiradores. Cualquier empresa que se ocupe de la prevención de riesgos laborales tendrá en cuenta este aspecto y tratará de concienciar a sus clientes sobre el uso correcto de los EPI.

¿Para qué se usa un EPI?

Los EPIs se usan para proteger a los trabajadores de lesiones o enfermedades relacionadas con el trabajo. Por ejemplo, los guantes pueden proteger las manos de cortes o quemaduras, mientras que las gafas pueden evitar que los objetos voladores le dañen los ojos.

Los EPI deben utilizarse cuando existan riesgos evidentes para la salud de los trabajadores que no puedan evitarse por otros medios o procedimientos de organización de la actividad de la empresa. Por tanto, es el último recurso que cualquier empresa debe utilizar para proteger la salud de sus empleados.

 

Tipos de EPI que existen

Hoy en día, los EPI cubren todo el cuerpo, pero sólo se requieren los EPI que protegen la(s) zona(s) de riesgo en cada lugar de trabajo.

Hay equipos de protección para los ojos y la cara, para las vías respiratorias, para los pies y las piernas, para el oído, para el abdomen y el tronco, y para la cabeza.

Entre los equipos de protección que se pueden encontrar, destacan los cascos, las máscaras, las gafas, los auriculares, los cinturones de seguridad, los chalecos, los cinturones o las botas de seguridad por su mayor uso.

 

Normativa sobre equipos de protección individual (EPI)

La legislación vigente al respecto, es decir, la Ley 31/1995 de Prevención de Riesgos Laborales, establece en su artículo 17.2 que «el empresario está obligado a proporcionar a sus trabajadores los equipos de protección individual necesarios para el desempeño de sus tareas y a velar por su cumplimiento y uso efectivo cuando sea necesario».

Deja un comentario